La Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó este lunes por consenso la resolución titulada “La Wiphala para vivir bien en armonía, equilibrio y complementariedad con la Madre Tierra”, presentada por el Estado Plurinacional de Bolivia durante el 79º período de sesiones.

El documento fue adoptado bajo el tema 14 del programa oficial, Cultura de Paz, y reafirma los principios fundamentales de la Carta de las Naciones Unidas, la Declaración Universal de Derechos Humanos, la Declaración sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y otros instrumentos internacionales de derechos colectivos y protección cultural.

La resolución reconoce a la Wiphala —emblema multicolor originario de los pueblos indígenas andinos— como símbolo de la armonía con la naturaleza, portador de valores vinculados a la vida, la justicia, la paz, la unidad y la convivencia entre todos los seres vivos.

El texto invita a los Estados Miembros a promover el respeto y la valoración de todas las culturas del mundo, destacando a la Wiphala como una manifestación viva de identidad, unidad y sabiduría ancestral. Asimismo, alienta a visibilizar este símbolo en espacios públicos, educativos e institucionales, conforme a las realidades y contextos de cada país.

Uno de los puntos centrales de la resolución exhorta a la comunidad internacional a redoblar esfuerzos para erradicar el racismo, la discriminación, la xenofobia y toda forma de intolerancia, con énfasis en aquellas que afectan a los pueblos indígenas. Se reafirma también el derecho de estos pueblos a mantener, proteger y desarrollar su patrimonio cultural y sus conocimientos tradicionales.

Con la aprobación de esta resolución, Bolivia reafirma su compromiso con el multilateralismo, la diplomacia de los pueblos y el diálogo intercultural. La iniciativa promueve los principios del Vivir Bien como alternativa ética y civilizatoria frente a los desafíos globales actuales, destacando el papel de los pueblos originarios en la construcción de una cultura de paz y respeto hacia la Madre Tierra.